LOS DATOS DE LA CONSEJERÍA Y DEL COLEGIO COINCIDEN
Las agresiones en Andalucía crecen un 26% en la primera mitad de 2010
El registro de atención a los profesionales del Servicio Andaluz de Salud (SAS) ha acumulado en el primer semestre del año un total de 674 agresiones contra sanitarios mientras se encontraban en el ejercicio de sus funciones, lo que supone un 26 por ciento más que las registradas en los primeros seis meses de 2009, según informa Europa Press.
De las 674 agresiones, 151 fueron físicas, mientras que los 523 episodios restantes fueron amenazas de tipo verbal. Atendiendo a su comparativa semestral y al tipo de amenaza, las agresiones físicas aumentaron en estos seis primeros meses un 10,21 por ciento respecto al mismo periodo de 2009, al igual que las de tipo verbal, que crecieron un 30 por ciento.
Por provincias, Málaga y Sevilla casi acumulan por sí solas la mitad de todas las agresiones físicas cometidas en este periodo. En concreto, Málaga ha sido la que ha registrado un mayor número de episodios de este tipo (166), seguida de Sevilla (153 agresiones), por lo que entre ambas representan el 47,32 por ciento de todas las agresiones.
Prueba de ello, han sido "las 15 sentencias relacionadas con agresiones físicas o verbales sufridas por profesionales, de las cuales cinco han incluido la tipificación de delito de atentado" contra la autoridad pública en el ejercicio de sus funciones.
Estudio del Observatorio
José Miguel Pena, coordinador del Observatorio de Agresiones del Consejo Andaluz de Colegios de Médicos, tampoco ha mostrado sorpresa al conocer estos datos. Según el experto estas cifras coinciden con el primer estudio que realizó el Observatorio.
El órgano del consejo, que se creó a principios de 2010 (ver DM del 14-IV-2010), ha revelado en su estudio que el 53,6 por ciento de los médicos andaluces reconoce que existe un problema de maltrato o violencia en su lugar de trabajo y que uno de cada cuatro facultativos ha sufrido maltrato o violencia. El 41, 7 por ciento de los agredidos admitieron que no habían tomado ninguna medida. El estudio del Observatorio de Agresiones del Consejo Andaluz de Colegios de Médicos se realizó sobre una muestra de 56 médicos.
Ante este panorama de datos procedentes de distintos organismos, cabría preguntarse si se está trabajando en alguna actuación en concreto para evitar el incremento de las agresiones. En respuesta a esta pregunta, Pena ha señalado a Diario Médico que el trabajo del Observatorio es evaluar la agresividad en el SAS y reconocer los factores de riesgo modificables sobre los que actuar. También señala que el crecimiento de la agresividad en la asistencia sanitaria es un fenómeno en crecimiento en todo el mundo y que el caso andaluz no es excepcional.
"Los episodios reconocidos son sólo la punta del iceberg de un fenómeno mayor", según el experto, para el que esta cuestión puede convertirse en una de los factores que más preocupe al médico en el ejercicio de su trabajo. Aun así, Pena ofrece una hipótesis sobre uno de los motivos que podría haber influido en el incremento de las agresiones: "El proceso de feminización de la profesión. En mi clase de la facultad tengo 124 alumnos, de los que 108 son mujeres. El porcentaje de mujeres en Medicina es del 80 por ciento y hay estudios que demuestran que la mujer es más agredida que el hombre, especialmente de manera verbal".
De las 674 agresiones, 151 fueron físicas, mientras que los 523 episodios restantes fueron amenazas de tipo verbal. Atendiendo a su comparativa semestral y al tipo de amenaza, las agresiones físicas aumentaron en estos seis primeros meses un 10,21 por ciento respecto al mismo periodo de 2009, al igual que las de tipo verbal, que crecieron un 30 por ciento.
Por provincias, Málaga y Sevilla casi acumulan por sí solas la mitad de todas las agresiones físicas cometidas en este periodo. En concreto, Málaga ha sido la que ha registrado un mayor número de episodios de este tipo (166), seguida de Sevilla (153 agresiones), por lo que entre ambas representan el 47,32 por ciento de todas las agresiones.
- Los episodios de violencia física crecieron un 10 por ciento en el primer semestre de 2010 con respecto a 2009, y los verbales, un 30 por ciento
Prueba de ello, han sido "las 15 sentencias relacionadas con agresiones físicas o verbales sufridas por profesionales, de las cuales cinco han incluido la tipificación de delito de atentado" contra la autoridad pública en el ejercicio de sus funciones.
Estudio del Observatorio
José Miguel Pena, coordinador del Observatorio de Agresiones del Consejo Andaluz de Colegios de Médicos, tampoco ha mostrado sorpresa al conocer estos datos. Según el experto estas cifras coinciden con el primer estudio que realizó el Observatorio.
El órgano del consejo, que se creó a principios de 2010 (ver DM del 14-IV-2010), ha revelado en su estudio que el 53,6 por ciento de los médicos andaluces reconoce que existe un problema de maltrato o violencia en su lugar de trabajo y que uno de cada cuatro facultativos ha sufrido maltrato o violencia. El 41, 7 por ciento de los agredidos admitieron que no habían tomado ninguna medida. El estudio del Observatorio de Agresiones del Consejo Andaluz de Colegios de Médicos se realizó sobre una muestra de 56 médicos.
- La feminización de la profesión puede haber favorecido al incremento de las agresiones, según José Miguel Pena, del Observatorio de Agresiones
Ante este panorama de datos procedentes de distintos organismos, cabría preguntarse si se está trabajando en alguna actuación en concreto para evitar el incremento de las agresiones. En respuesta a esta pregunta, Pena ha señalado a Diario Médico que el trabajo del Observatorio es evaluar la agresividad en el SAS y reconocer los factores de riesgo modificables sobre los que actuar. También señala que el crecimiento de la agresividad en la asistencia sanitaria es un fenómeno en crecimiento en todo el mundo y que el caso andaluz no es excepcional.
"Los episodios reconocidos son sólo la punta del iceberg de un fenómeno mayor", según el experto, para el que esta cuestión puede convertirse en una de los factores que más preocupe al médico en el ejercicio de su trabajo. Aun así, Pena ofrece una hipótesis sobre uno de los motivos que podría haber influido en el incremento de las agresiones: "El proceso de feminización de la profesión. En mi clase de la facultad tengo 124 alumnos, de los que 108 son mujeres. El porcentaje de mujeres en Medicina es del 80 por ciento y hay estudios que demuestran que la mujer es más agredida que el hombre, especialmente de manera verbal".
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